Los Fotógrafos Protestan Contra la Capacidad de la Policía de Parar y Registrar PDF
Escrito por Guardian.com.uk   


Los fotógrafos protestan en la Plaza de Trafalgar contra el uso de las capacidades antiterroristas de parar y registrar, porque consideran que son usadas por la policía para amedrentar a la gente con cámaras. Fotografía: Oli Scarff/Getty Image



Miles de fotógrafos han protagonizado una protesta masiva en contra del uso “malicioso” de las leyes antiterrorismo para impedirles tomar fotos en lugares públicos.

 

La Plaza de Trafalgar, en el centro de Londres, fue iluminada por destellos de flash como parte de la manifestación contra el hecho de que los fotógrafos sean injustamente blanco de la policía después de tomar fotos. Por lo general son interrogados con base en la sección 44 del Acta Terrorista 2000, que le permite a los oficiales detener y registrar sin necesidad de “sospecha” en determinadas áreas del Reino Unido.

 

Más de 2 mil fotógrafos, tanto profesionales como aficionados, tomaron parte en la protesta organizada por el grupo ¡Soy fotógrafo, no terrorista!, nombre que muchos llevaron en sus letreros.

 

A los espectadores se le entregaba tarjetas de parar y registrar, delineando sus derechos.

 

El fotógrafo independiente y colaborador del periódico inglés Guardian, Marc Vallee, quien ayudó a organizar la protesta con llamados realizados en las redes sociales Twitter y Facebook, se dijo complacido por la concurrencia lograda.

 

“Es muy evidente que los fotógrafos profesionales están siendo registrados por todo el país por el hecho de ser fotógrafos, no por ser sospechosos”, dijo.

 

“Es un derecho de la ley inglesa tomar fotos en sitios públicos y estamos aquí para demostrarlo.”

 

Antes, el mismo mes, la Corte Europea de Derechos Humanos determinó que el uso del poder antiterrorista de parar y registrar fotógrafos y manifestantes pacíficos no estaba “suficientemente delimitada”.

 

La decisión de siete jueces reprobó el proceso mediante el cual las detenciones y registros basados en la sección 44 son autorizados por el secretario del interior, y destacó la falta de protecciones parlamentarias y legales para prevenir abusos.

 

Los jueces dijeron que debido a que la decisión de los oficiales sobre parar y registrar a alguien en una determinada área se basa sólo en la corazonada o en intuición profesional, el efecto es “un claro riesgo de arbitrariedad”.

 

Las 43 corporaciones policíacas de Inglaterra y Gales recibieron un memorándum con la advertencia de que los oficiales estaban “confundidos” acerca del poder de parar y registrar.

 

“Se le debe recordar a los oficiales que el hecho de que un miembro de la sociedad o un reportero tomen fotos de un edificio público no es un delito, y que el uso de cámaras no es razón para utilizar la capacidad de parar y registrar”, decía la circular distribuida el año pasado.

 

Andy Trotter, jefe de la Policía del Transporte Británico, quien redactó el borrador de orientación para la Asociación de Jefes de la Policía, dijo que se debe dejar a los fotógrafos hacer su labor sin molestarlos.

 

Este cambio en la policía fue una respuesta directa a los reportajes negativos que aparecieron en los medios, acerca de los fotógrafos profesionales y aficionados que reclamaban haber sido parados injustamente mediante la invocación de la sección 44.

 

Una cadena de incidentes de alto perfil alrededor del uso de la legislación en contra de los fotógrafos ha avergonzado a los altos oficiales, que en privado aceptan que los subordinados están empleando mal su autoridad en el terreno.

 

En diciembre, Paul Lewis, reportero del Guardian, fue parado y registrado cuando tomaba fotos del edificio Gherkin en Londres, y Grant Smith, un fotógrafo de arquitectura, fue arrestado a la vuelta de la esquina cuando retrataba la Iglesia de Cristo, de Sir Christopher Wren.

 

Otros casos recientes son el de Jeff Overs, fotógrafo de la BBC, quien comentó en el programa de Andrew Marr, que fue detenido bajo sospecha de hacer reconocimiento del terreno para el terrorismo, cuando fotografiaba la Catedral de San Pablo, y el de Andrew White, un fotógrafo aficionado interrogado por dos oficiales de apoyo a la comunidad por tomar fotos de la luces navideñas en Brighton.

 

En abril pasado, dos turistas austriacos fueron obligados a borrar sus fotos después de haber sido parados por la policía en Walthamstow, y Alex Turner, otro fotógrafo aficionado, fue arrestado mediante la invocación de la sección 44 por haber tomado fotos de una tienda de fish and chips en Kent.

 

 

 

Guardian.com.uk

 

 
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